Entre 1966 y 2015, el nivel del mar en las costas de Cuba se elevó 6,77 centímetros como consecuencia del cambio climático, advierten expertos de la isla.
En específico, explicó la directora de la Agencia de Medio Ambiente, Maritza García, esta problemática está afectando en primera instancia a las zonas bajas de los litorales costeros.
Según indicó un reporte de la estatal Agencia Cubana de Noticias, actualmente, existen programas y modelos computarizados que posibilitan dar una panorámica aproximada de la incidencia de la penetración del mar tierra adentro en los próximos 100 años.
Abel Centella, director científico del Instituto de Meteorología de la Agencia de Medio Ambiente de Cuba, señaló, a su vez, que el incremento del nivel del mar “puede ocasionar la pérdida de territorios, daños a los ecosistemas costeros” y “cuantiosos daños al sector turístico”.
Además, países como Cuba enfrentan “sequías cada vez más prolongadas”. Por otra parte, añadió, el incremento de las temperaturas “puede ocasionar daños a la producción de alimentos” y a “los recursos hídricos que ya son escasos en algunas zonas” del Caribe.
“Ha habido un avance (de los gobiernos) en ese nivel de comprensión, de consciencia, y de entender que es un reto y que hay que empezar a actuar y a prepararse desde ya”, pero eso “no es suficiente”, apuntó Centella.
En ese sentido, la amenaza desborda la capacidad de los países por separado e impone una acción coordinada. “Si lo hacemos de manera coordinada, podemos ser mucho más eficientes y obtener resultados mucho mejores”, añadió el científico, subrayando que “un reto importante para la ciencia en el Caribe es traducir los resultados científicos (…) en acciones y políticas” concretas.