La Brigada de Control Ambiental (BCA), que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, estuvieron en el municipio de Tigre, provincia de Buenos Aires, para realizar un operativo en la toma de muestras de agua en diversos puntos del delta del río Paraná, con el objetivo de analizar el grado de toxicidad presente por efecto de cianobacterias.
Sergio Federovisky, secretario de Control y Monitoreo Ambiental del Ministerio de Ambiente de la Nación, mencionó que “Frente a la floración de las cianobacterias y el riesgo que supone la aparición de estas bacterias tóxicas, el Ministerio de Ambiente decidió tomar muestras rigurosas y sistemáticas con el fin de determinar el grado de toxicidad del agua donde aparecen estos microorganismos”. En cuanto a los resultados el Secretario dijo que “las últimas mediciones indican grados de toxicidad preocupantes frente a lo cual el Ministerio desarrolla políticas activas para conocer la capacidad de potabilización del agua de las empresas proveedoras y así establecer protocolos con los municipios que determinen en qué momento debe prohibirse el acceso, la ingesta e incluso la pesca en zonas que estén con altos niveles de floración de cianobacterias y por lo tanto de toxicidad”.
Asimismo, el 25 de noviembre el Ministerio de Ambiente realizó la segunda reunión de la comisión interinstitucional que creó para darle tratamiento a la formación excesiva de cianobacterias en el Río de La Plata. Allí, se acordó el despliegue de campañas de monitoreo sostenidas en el tiempo por medio de imágenes satelitales y muestreo de aguas para advertir de forma temprana la proliferación de dichos microorganismos y de esa manera implementar las medidas para controlar sus impactos; entre otras resoluciones relevantes. La comisión está conformada por las provincias involucradas a través del Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA); empresas proveedoras de agua, como Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) y Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA); y miembros del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).
Además, la BCA realizó en los distritos bonaerenses de Berazategui y Ensenada otro operativo de fiscalización de aguas motivado por la problemática descrita.
Las cianobacterias son organismos microscópicos que se nutren de la materia orgánica del agua y son identificables por su tonalidad azul verdosa. Habida cuenta que liberan toxinas al medio en el que se encuentran, pueden tornarse un problema para la salud ambiental y de las personas. Su proliferación en el Río de la Plata responde a una multiplicidad de factores: la bajante histórica que acontece en su extensión; la cantidad de efluentes vertidos, que en el contexto antes mencionado redunda en una mayor concentración; y el aumento de la temperatura estacional y como efecto del cambio climático.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible junto a Prefectura Naval Argentina tienen previsto realizar la próxima semana llevar a cabo, nuevas tomas de muestras en los distritos de San Isidro, Palermo, Puerto de Buenos Aires, Quilmes, Berazategui y Punta Lara. Estos monitoreos realizado por el ministerio ambiental continuarán de manera sistemática durante todo el verano debido a que se prevé que con las altas temperaturas continúe la proliferación de las bacterias mencionadas.