El Comité Europeo de las Regiones (CDR), la asamblea que agrupa a las ciudades y regiones de la Unión Europea (UE), ha aprobado por unanimidad un dictamen que busca mejorar la legislación en el ámbito de la gestión de las aguas interiores, la calidad de las mismas, la escasez de agua dulce, así como la protección contra las inundaciones.
El CDR ha subrayado que la gestión del agua es un ámbito político de uso intensivo de capital en el que es preciso que se realicen grandes inversiones. Los dirigentes locales recomiendan adoptar un programa de acción a escala de la UE para que los Estados miembros alienten proyectos de innovación hídrica y se reduzcan las cargas administrativas con el fin de agilizar el acceso a los fondos de la Unión para proyectos relativos a la gestión hídrica.
El cambio climático está afectando al manejo del agua y se necesita un enfoque coherente entre estos dos ámbitos de actuación. “A largo plazo, el reto en Europa es alcanzar efectivamente los objetivos establecidos en materia de calidad hídrica y afrontar las consecuencias de la subida del nivel del mar”, declaró el holandés Cees Loggen.