Las empresas eléctricas alemanas se anotaron una importante victoria después de que el máximo tribunal del país declarara ilegal un impuesto sobre el combustible nuclear, lo que permitirá a E.ON, RWE y EnBW reclamar unos 6.000 millones de dólares.
En un fallo muy esperado, el Tribunal Constitucional de Alemania dijo que el impuesto, que se impuso entre 2011 y 2016, era “formalmente ilegal y vacío”. Las acciones de E.ON, RWE y EnBW subieron entre un 2,5% y un 3,2% tras la noticia.
El veredicto supone la segunda victoria para las eléctricas alemanas por la política nuclear del país. El alto tribunal falló en diciembre que una decisión de cerrar todas las plantas nucleares tras el desastre de Fukushima en Japón violaba algunos de sus derechos de propiedad.