La canciller alemana y el presidente francés destacaron en la Cumbre del Clima en Bonn que los mayores contaminadores deben ayudar a los países pobres y vulnerables a afrontar los efectos del calentamiento global.
“Las oportunidades de innovación tienen que ser para todos, y en especial para más los más pobres”, sostuvo Merkel, que renovó el compromiso de Alemania de movilizar junto con otros países ricos 100.000 millones de dólares al año de capital privado y público según lo pactado en París.
“Los países ricos tienen una doble responsabilidad. Hemos sido responsables del cambio climático y por ello debemos participar activamente en su mitigación”, secundó Macron a Merkel.
El jefe de Estado galo invitó a una cumbre el 12 de diciembre en París en la que se concretará la financiación de medidas. “En París podremos y movilizar fondos públicos y privados con un plan concreto”, precisó sobre el encuentro.