La Secretaría de Ambiente celebró los cuatro años del programa Puntos Verdes Móviles. Los Puntos Verdes Móviles son camionetas que recorren toda la ciudad instalándose en espacios de gran circulación de vecinos y que están especialmente adaptadas para recibir residuos especiales.
Reciben pilas en desuso, aceite de fritura, aparatos eléctricos y electrónicos pequeños y en desuso, materiales de friselina, tóners vacíos, botellas de amor; y desde este año trabajan con emprendedores que utilizan materiales que consideramos residuos y los incorporan a su cadena productiva como materia prima. Actualmente reciben medias limpias de pares perdidos o rotas, para la organización “Las Medias Perdidas” que realizan muñecos junto a mujeres de barrios vulnerables.
“Desde la Ciudad creamos los Puntos Verdes de Móviles para recibir aquellos residuos que exigen un tratamiento especial y pueden ser reciclados. Esto va en línea con la importancia que tiene para nosotros la economía circular como una de las maneras de fomentar una mejor relación con el ambiente y avanzar en la lucha contra el cambio climático”, aseguró Eduardo Macchiavelli, secretario de Ambiente.
El Programa de Puntos Verdes Móviles forma parte de algunas de las acciones descritas en el Plan de Acción Climática 2050 con el que la Ciudad ha propuesto adaptarse y mitigar los efectos del cambio climático.
En este caso, los Puntos Verdes Móviles forman parte de las propuestas tendientes a avanzar en la economía circular lo que permite transformar los residuos en materia prima de nuevos procesos productivos y fortalecer el cambio de hábitos en los vecinos para generar conciencia sobre la separación en origen.
“Lograr una disminución en la cantidad de residuos que van a relleno sanitario redunda en una reducción de los gases de efecto invernadero (GEI) que se liberan a la atmósfera. Cabe recordar que, según el Inventario de Gases de Efecto Invernadero 2018, los residuos constituyen el 17% del total de emisiones de la Ciudad”, agregó Renzo Morosi, presidente de la Agencia de Protección Ambiental (APrA).
Desde el inicio del programa se recibieron más de 6000 litros de aceite vegetal usado, más de 100 toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, 17 toneladas de pilas y 14 toneladas de Botellas de Amor.