La población de jirafas disminuyó alrededor de un 40% en los últimos 30 años a nivel global. Así, la especie fue catalogada como “vulnerable” en la última Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés).
Según el informe de la IUCN, que fue presentado en el marco de la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica (COP13), en 1985 había entre 151.702 y 163.452 ejemplares de jirafas en todo el planeta, número que se redujo hasta los 97.562 en 2015.
Entre las principales causas de esta tendencia figuran el aumento de la población de seres humanos dentro de sus hábitas, la continuidad de la caza ilegal, la expansión de la agricultura y la minería, y el incremento del conflicto humanidad-vida silvestre.