La venta e interés por los vehículos eléctricos híbridos crece día a día por sus múltiples beneficios en materia de ahorro y cuidado del medio ambiente. Gracias a que combinan un motor de combustión interna con otro eléctrico y un sistema de regeneración de energía, la tecnología híbrida es una solución práctica y eficiente para reducir el consumo de combustible y las emisiones de CO2.
La principal característica de estos vehículos es que no necesitan carga eléctrica externa: son autorrecargables. ¿Qué significa? Que aprovechan la fuerza del vehículo durante la desaceleración y el frenado para generar electricidad, por lo que no tienen la necesidad de enchufarse. La diferencia en el ahorro de combustible es muy notable. Un híbrido, como Corolla Hybrid o Corolla Cross Hybrid, tiene el potencial de consumir hasta un 50% menos que su par convencional. Esto ocurre en las ciudades, donde la repetición de desaceleraciones y frenos permiten una regeneración continua de energía. Por su uso promedio, los híbridos ahorran al menos un tercio del combustible.
Sin embargo, más allá de esta eficiencia, el modo de conducir también impacta en el consumo. Toyota es la compañía que más híbridos vende en el mundo y también en Argentina con casi el 90% del mercado. En nuestro país, además, ya es posible alquilar vehículos híbridos en KINTO Share, la aplicación de movilidad de la compañía. A continuación, las claves para aprovechar al máximo las ventajas de esta tecnología.
¿De qué hablamos cuando hablamos de “conducción eficiente”?
La conducción eficiente busca lograr un bajo consumo de combustible, reducir el impacto en el medio ambiente, mejorar el confort a la hora del manejo y disminuir los riesgos al volante.
La conducción eficiente no es exclusiva de los híbridos. Para cualquier vehículo es recomendable planificar previamente el trayecto, evitar las aceleraciones repentinas, moderar la velocidad o controlar la presión de los neumáticos, moderar el aire acondicionado. En el caso de los híbridos, hay más tips para tener en cuenta.
El sistema híbrido Toyota es totalmente transparente para el conductor. En el display de información es posible ver las distintas modalidades del funcionamiento: tanto cuando el motor eléctrico entrega potencia como cuando, durante el frenado y la desaceleración, se activa el sistema de recarga para alimentar a la batería. Además, el display ofrece información de consumo y autonomía, que te permitirán conocer la performance a cada momento.
Priorizar el modo ECO
Luego del arranque eléctrico en silencio total, el sistema híbrido gestiona automáticamente la propulsión más eficiente para consumir lo mínimo posible. El modo ECO lleva esto más allá y ajusta la aceeración y el sistema de aire acondicionado para consumir menos energía.
ECO: A bajas revoluciones, el vehículo híbrido se mueve en modo eléctrico durante los primeros metros. Luego, el motor térmico se enciende o se apaga de acuerdo con el nivel de aceleración o desaceleración.
Power: En subidas o sobrepasos, el motor térmico cobra protagonismo para entregar la potencia que necesita el vehículo. Se combina el máximo par de ambos motores para tener una respuesta ágil y segura.
Charge: Cuando se levanta el pie del acelerador o se aplica el freno. La recarga automática se potencia en las pendientes.
Frenar suavemente
No frenar a último momento. Desacelerar con tiempo y frenar con anticipación le permite al sistema híbrido capturar más energía que con una frenada brusca. Cuando más carga en la batería, mayor será el aporte del motor eléctrico para mover el vehículo. Además, frenar suavemente alarga la vida útil de las pastillas de freno.
Buscar la velocidad constante: modo “a vela”
En velocidad constante, el sistema detectará los momentos donde no necesita energía del motor térmico y funcionará solo con el motor eléctrico. La velocidad constante es recomendable aun cuando el motor está encendido, porque le permite trabajar de manera eficiente.
Acelerar suavemente
La planificación del viaje para no tener que manejar apurado y la anticipación de las maniobras permite utilizar el acelerador de manera tranquila, sin sobresaltos ni sobreexigencias al motor. Eso contribuye con el sistema híbrido, que básicamente tiene tres etapas: