El presidente Gustavo Petro ha sido la voz más destacada en esta cumbre mundial del clima. Rebelde, a contramano, no apareció en la foto oficial del evento junto al resto de dirigentes internacionales.
Como había anunciado el día anterior, presentó un decálogo. Tuvo que hablar más deprisa de lo que acostumbra para que le diera tiempo a decirlo todo. “La COP ya no da respuestas y el tiempo se agotó. Las conferencias globales de gobiernos deben poner la política al mando para generar un plan global de desconexión de los hidrocarburos de manera inmediata. La descarbonización es un cambio real y profundo del sistema económico que domina”, arrancó. A continuación, alertó del peligro que conlleva seguir por este camino: el de la extinción de la humanidad. Y dijo que era el momento de actuar globalmente como seres humanos, “con o sin permiso de los gobiernos”.