El presidente Alberto Fernández mantuvo ayer una reunión en Berlín con el canciller federal de Alemania, Olaf Scholz, junto a quien analizó las consecuencias de la guerra en ambas regiones y pidió “encontrar una respuesta y un camino de salida a este conflicto”, además de destacar las oportunidades que brinda la Argentina para proveer alimentos y energía.
El Jefe de Estado destacó que “Argentina es hoy un reservorio de lo que el mundo está demandando en este presente”, ya que “somos grandes productores de alimentos y de energía”.
“Tenemos la segunda reserva de gas no convencional, que nosotros queremos que sirva para proveer al mundo en forma de gas licuado, y allí tenemos una gran oportunidad para trabajar junto a Alemania”, ponderó.
En este punto también mencionó el desarrollo de una planta de hidrógeno verde, así como proyectos de hidrógeno azul por parte de las empresas de gas. “Son todas posibilidades que tenemos para llevar energía a otras latitudes del mundo”, profundizó.
En su declaración, Scholz dijo que fue un “encuentro sustancioso sobre las amplias relaciones económicas” y manifestó su “interés de acompañar a las empresas alemanas en sus actividades en Argentina para cooperar en la superación de obstáculos”. En ese sentido celebró, asimismo, “la conversación en curso que mantiene el Gobierno argentino con varias compañías alemanas”.
Destacó, por otro lado, que “Argentina tiene un enrome potencial en materia de energías renovables para la producción del hidrógeno verde, que será una contribución valiosa para alcanzar la neutralidad climática”.