El 10 de mayo se conmemora el día del recuperador urbano, que tiene como objetivo visibilizar la importancia de su labor diaria.
Desde 2002, la Ciudad de Buenos Aires inició un programa que contempló la integración de los recuperadores urbanos al circuito formal de trabajo, con el objetivo de mejorar su calidad de vida. Dicha formalización tuvo varias características entre las que se destacan: la incorporación de las herramientas de trabajo necesarias, uniformes y la adecuación de la metodología de sus tareas que pasaron de realizarse en la vía pública a realizarse en los Centros Verdes.
Además, se les garantizó el acceso al sistema de salud por medio de una obra social y también se les brindó asistencia a través de dos guarderías que funcionan como espacio de contención, cuidado, alimentación y desarrollo personal de los niños y niñas, para aquellos asociados que tienen menores a cargo.
El programa busca también promover el crecimiento profesional de los recuperadores urbanos. Actualmente, cinco de las doce cooperativas cuentan con un equipo de promoción ambiental integrado por 72 mujeres que solían desempeñarse como recuperadoras urbanas, y hoy se desempeñan como generadoras de cambio. Sus tareas consisten en dictar charlas y talleres de sensibilización sobre residuos, y generan el vínculo entre el recuperador y el vecino, además de explicar cómo separar los residuos y cómo trabajan las cooperativas de recuperadores urbanos.
En ese marco, y al tener en cuenta la importancia del rol de los recuperadores, el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño impulsó recientemente el plan BA Recicla, que además de mejorar la infraestructura de disposición, recolección y tratamiento de los residuos, tiene como objetivo fortalecer la gestión social del sistema junto a las cooperativas de recuperadores urbanos.
“Los recuperadores urbanos cumplen un papel muy importante en la conservación del ambiente. Son el eslabón fundamental del sistema de reciclaje, por eso buscamos afianzar su rol mejorando las rutas de recolección, promoviendo la separación en origen y fortaleciendo su relación con los generadores de residuos”, expresó la ministra de Espacio Público e Higiene urbana de la Ciudad de Buenos Aires, Clara Muzzio.