En el marco del Día de la Acción Ambiental por la Cuenca Matanza-Riachuelo, conversamos con Andrés Nápoli, director ejecutivo de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), quien destacó el cumplimiento de los 10 años del fallo de la Corte que ordenó el saneamiento de la cuenca.
¿Dónde estamos parados con respecto al cumplimiento de esta orden?, preguntamos a Nápoli.
Se ha recorrido el camino más difícil, la etapa inicial en la cual se conformó una autoridad de la cuenca y se comenzó a limpiar el río. Hoy se puede observar un río totalmente despejado, lo cual no significa que esté saneado ni mucho menos, faltan realizar muchísimas acciones. Sin embargo, hemos puesto en marcha algunas cuestiones importantes, por ejemplo la obra pública de mayor dimensión de la Argentina en el Riachuelo : el colector margen izquierdo del Matanza Riachuelo, que va a colectar todos los líquidos cloacales que fluyen libremente y desbordados de la Ciudad de Buenos Aires. Asimismo, se han comenzado las tareas de relocalización de la población en zonas de riesgo.
Cuando finalice la obra del margen izquierdo, ¿se avanzará para sanear el fondo del Riachuelo?
Sin la obra que se está haciendo, el Riachuelo no tiene destino de saneamiento. Lo que primero hay que hacer es detener la fuente de contaminación. Lo que tiene que ver con el fondo del río es una discusión que deberá darse una vez que la obra esté concretada, junto con el control industrial de las fuentes de contaminación. Hay que trabajar con los dos tópicos en paralelo: primero se realiza la obra de saneamiento cloacal, luego el control industrial, y finalmente laa labores relativas a los barros del fondo del Riachuelo.