Dos estudios sobre el calentamiento global en las futuras décadas concluyeron que para el año 2100 el clima en la Tierra podría aumentar en 3.6 grados Fahrenheit (equivalente a 2 grados centígrados), lo que pondría en riesgo las condiciones de vida para la raza humana.
Lo más sorprendente es que, aunque las investigaciones difundidas por la CNN utilizaron diferentes métodos de análisis, sus dramáticas conclusiones fueron las mismas.
De hecho, el planeta parece haber llegado a un punto de no retorno, ya que el incremento paulatino de la temperatura continuaría, en una escala menor, aun si se tomara la decisión inmediata de no usar más combustibles fósiles.