El diputado provincial por Santa Fe, Rubén Giustiniani, diifundió el contrato de concesión entre la petrolera nacional YPF y la norteamericana Chevron para explotar Vaca Muerta. A decir del legislador, la operación se dio a través de una serie de compañías off shore radicadas en paraísos fiscales, por lo que no hubo una inversión directa sino un préstamo.
Las dos firmas en cuestión, según Giustiniani, son “Chevron Overseas”, radicada en Islas Bermudas, e “YPF Shale Oil Investment One, asentada en el distrito estadounidense de Delaware. El contrato -que hasta ahora permanecía secreto- había otorgado la concesión por 35 años de la principal zona en Neuquén de recursos naturales a nivel nacional, el yacimiento Vaca Muerta, que es la segunda mayor reserva de shale gas y la cuarta de shale oil a nivel global.
Desde el punto de vista ambiental, el diputado indicó que la maniobra suscita dudas de consideración. En ese sentido, se preguntó si “a través de este esquema sofisticado se licúa la responsabilidad de Chevron, porque no aparece nunca y sabemos que el fracking es un método observado por contaminación ambiental”.
Según sus palabras, en lo inmediato se iniciará un estudio en profundidad del contrato a fin de poner sus detalles en consideración de las organizaciones gubernamentales y de la prensa. Giustiniani destacó la obtención del acuerdo para darlo a publicidad como “un triunfo del derecho de acceso a la información y de la transparencia”.