En su programa mañanera de radio de esta semana, el presidente mexicano López Obrador (AMLO) ha estado en contacto con los presidentes de Argentina (Alberto Fernández), Bolivia (Luis Arce) y Chile (Gabriel Boric) para analizar la creación de una asociación en torno al litio en orden a crear una suerte de OPEP de este mineral. Para eso, tienen que superar ciertos escollos dado que la explotación del litio en Chile es privada, en Bolivia es estatal y en Argentina depende de las provincias. Por su parte, en México ya se comenzó a discutir la nacionalización del litio.
“Ha habido alguna comunicación con el presidente de Bolivia, él a su vez tiene relación, como nosotros, con el presidente de Argentina, que también tienen litio, y con el presidente de Chile, con el propósito que se vaya creando una asociación para ayudarnos mutuamente”, dijo el presidente López Obrador.
Sobre estos planes, que el mandatario mexicano ya había anticipado en abril, la ministra de Minería de Chile, Marcela Hernando, aseguró s que su país está dispuesto a participar en iniciativas “en intercambio de conocimientos, experiencias, ciencia y tecnología”.
Los gobiernos de Argentina y Bolivia, por el momento no hicieron declaraciones sobre el proyecto, aunque se descuenta que la iniciativa sería una oportunidad para potenciar la producción regional de un insumo mineral con creciente demanda a nivel global.
El Congreso mexicano aprobó en abril una propuesta del presidente López Obrador para reformar la ley de minería, orientada, entre otras cosas, a reservar al Estado la exploración y explotación de ese mineral estratégico, además de crear una empresa pública con esos fines. El mineral en México se encuentra en arcilla o en roca, lo que hace más difícil su extracción, en comparación con los salares de Argentina, Bolivia y Chile, que tienen importantes reservas de litio a nivel mundial en yacimientos en salmuera.