México se fijó como meta generar un 35% de energía limpia al 2024. Este porcentaje, definido en la “Estrategia de Transición para Promover el Uso de Tecnologías y Combustibles más Limpios”, podrá lograrse mucho antes de lo planificado –probablemente en los próximos diez meses–, tras la incorporación de más proyectos renovables en la red.
Se previó que 84 nuevas centrales de generación eléctrica estarían operativas entre el periodo correspondiente al 1º de agosto de 2018 y el 1º de junio de 2019. Las mismas significarán 12,430 megawatts (Mw) de potencia instalada. Del total, un 44% representa a energías no renovables y un 66% a energías renovables.
Aquella mayoría corresponde a 56 proyectos de generación que suman 6411 Mw. Diferenciados por tecnología, serán 42 instalaciones de solar fotovoltaica que alcanzarán los 4326 Mw, 12 emprendimientos eólicos por un total de 1984 Mw, una hidroeléctrica de 71 Mw y una central de biogás con 30 Mw.