La empresa Gases Aconcagua SA vendió una planta de producción de nitrógeno a partir del aire atmosférico a la bodega Aranjuez, de Bolivia.
La operación se concretó en el marco de la Feria Sitevinitech, que organizó la Fundación ProMendoza, y en las últimas horas el titular de la firma, Osvaldo Rofrano, cargó el equipamiento en el transporte que lo llevará hasta Tarija, en el país vecino.
“Esta máquina es un diseño propio de Gases Aconcagua, que se desarrolló en la década de los 90, con el apoyo de algunas bodegas que se involucraron desde el comienzo en esta iniciativa que obtuvo el premio Mendoza Innova en 2011”, contó Rofrano.
Según indicó el empresario, al utilizar el nitrógeno gaseoso durante el proceso de elaboración y embotellamiento de vinos se asegura la sanidad de los caldos y se evita la utilización de sulfuro, que da un olor desagradable a la bebida.
Los desarrolladores calculan que una empresa mediana puede amortizar la inversión en este equipamiento en un año y medio y a partir de allí puede ahorrar gran cantidad de dinero, porque la producción de este gas en la planta propia cuesta 10 veces menos que comprar el nitrógeno gaseoso que se comercializa en camiones.
Desde 2011, la empresa vendió más de 15 equipos a importantes establecimientos vitivinícolas interesados en ahorrar y mejorar su competitividad.
