Tras el cierre de la Cumbre del Clima (COP24) en Katowice, Polonia, que terminó el sábado con un acuerdo en el libro de reglas que permitirán aplicar el Acuerdo de París, aparecieron críticas y elogios por parte de funcionarios y dirigentes de Europa.
Por un lado, la Comisión Europea (CE) calificó de “equilibrado” al pacto y destacó los consensos. “En Europa y trabajando unidos como europeos hemos alcanzado un acuerdo equilibrado sobre la normas para aplicar el Acuerdo de París. La Unión Europea tuvo un papel instrumental a la hora de alcanzar este resultado”, expresó en un comunicado el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete.
Arias Cañete señaló que el club comunitario trabajó “con aliados de países desarrollados y en desarrollo y con grandes economías, en particular, con China, para incrementar la ambición y fortalecer los esfuerzos globales para combatir el cambio climático”.
En ese sentido, destacó el informe del Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático de la ONU (IPCC), el cual advierte que limitar la subida de temperaturas a 1,5 grados centígrados va a requerir “cambios sin precedentes” a nivel global y social, y que al ritmo actual de emisiones ese aumento de la temperatura se alcanzará entre 2030 y 2050.
“El ‘libro de reglas’ (sobre el Acuerdo de París) es fundamental para hacer posible y fomentar la acción por el clima a todos los niveles en el mundo, y el éxito aquí también significa éxito para el multilateralismo y el orden global basado en normas”, afirmó Arias Cañete, después de que Estados Unidos decidiera abandonar el Acuerdo de París.
Por su parte, el eurodiputado de Equo, Florent Marcellesi, opinó que la mayoría de los gobiernos europeos no mostró “la suficiente ambición”, aunque precisó que España jugó “un papel positivo”.
“Esta cumbre climática es una gran decepción. Las decisiones y la acción climática de los gobiernos están cada vez más alejados de las demandas ciudadanas y los análisis científicos”, aseguró en un comunicado.
Ante esta situación, pidió a la UE acudir a la próxima Asamblea General de la ONU, en septiembre de 2019, “con un objetivo de reducción de al menos 55% en sus emisiones de aquí a 2030”.
Paralelamente, la Red Europea de Acción Climática (CAN, en sus siglas en inglés), que agrupa a diversas ONG, señaló que los gobiernos “no han respondido de forma adecuada a los catastróficos impactos del cambio climático” destacados en el informe del IPCC.