Gran Bretaña ya no utilizará, a partir del 1 de octubre de 2024, carbón para generar electricidad, según anunció ayer la ministra de Energía y Cambio Climático, Anne-Marie Trevelyan.
La medida es parte de los compromisos del Gobierno británico para dejar de usar combustibles fósiles y descarbonizar el sector eléctrico con el fin de eliminar las contribuciones al cambio climático para 2050. El anuncio confirma la intención establecida por el Primer Ministro el año pasado de adelantar la fecha límite para terminar con la generación de electricidad a partir de carbón.
Esto destaca el liderazgo del Reino Unido para ir más lejos y más rápido en la reducción de emisiones y ser ejemplo en la lucha contra el cambio climático, previo a ser coanfitriones en noviembre de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2021 (COP26) en Glasgow. El Reino Unido también pide a todas las naciones que aceleren la eliminación gradual de la energía del carbón.
El Gobierno introducirá una nueva legislación para hacer esto lo antes posible. El Reino Unido ha logrado un progreso en la reducción del uso de carbón en el sector energético. Solo representó el 1,8% del mix eléctrico del Reino Unido en 2020, en comparación con el 40% de hace casi una década.
“El carbón impulsó la revolución industrial hace 200 años, pero ahora es el momento de tomar medidas radicales para eliminar por completo este combustible sucio de nuestro sistema energético. Hoy estamos enviando una señal clara a todo el mundo de que el Reino Unido está liderando el camino en la consignación de la energía del carbón a los libros de historia y que nos tomamos en serio la descarbonización de nuestro sistema energético para poder cumplir con nuestros ambiciosos objetivos climáticos, que están a la vanguardia a nivel mundial”, declaró la ministra de Energía y Cambio Climático, Anne-Marie Trevelyan.