La emisión de gases de efecto invernadero podrían causar en este siglo una subida de la temperatura del planeta de 2,7 grados centígrados, según alertó ayer la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La advertencia figura en el “Informe sobre la Brecha de Emisiones” de 2021, que publicó el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en la víspera de la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP26) en Glasgow.
“Para tener una oportunidad de limitar el calentamiento climático a 1,5 grados, tenemos ocho años para reducir casi a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero (…). El reloj hace tictac en voz alta”, subrayó la directora ejecutiva del PNUMA, Inger Andersen, tras la divulgación del informe.
Según el documento, las emisiones previstas por los Estados y las medidas de mitigación anunciadas son aún insuficientes para conseguir el objetivo marcado por el Acuerdo de París, que es limitar el aumento de la temperatura durante este siglo a 1,5 grados.
Para alcanzar esa meta sería necesario una reducción adicional anual, por encima de los compromisos actuales, de 28 gigatoneladas de equivalente de dióxido de carbono. Per el informe estima que, al ritmo actual, las emisiones globales anuales serán de cerca de 60 gigatoneladas de GtCO2e en 2021.
Frente a este escenario, los compromisos adquiridos por 49 países para alcanzar un estado de neutralidad de carbono podrían marcar “una gran diferencia” y reducir el calentamiento del planeta en 0,5 grados adicionales.
Asimismo, el documento subraya este año la necesidad de disminuir las emisiones de metano, el segundo gas de efecto invernadero que más contribuye al calentamiento global, ya que los compromisos actuales solo permitirían un tercio de la reducción necesaria para alcanzar la meta de 1,5 grados.
Fuente: www.efeverde.com