Días difíciles para las empresas del sector ambiental.
Con la llegada al país del COVID 19, el presidente Alberto Fernández decretó el Aislamiento Social Obligatorio hasta el 12 de Abril a través del DNU para proteger sanitariamente a cada uno de los argentinos. La medida pone a la economía argentina en stand by, lo que generará duras consecuencias económicas.
Si bien las empresas de servicios ambientales siguen funcionando, ya que en varios aspectos revisten el carácter de esenciales por su aporte a la operación y gestión ambiental de diversas plantas, no serán la excepción.
Empresarios del sector no solo esperan una caída abrupta en su facturación sino que ya vislumbran un cambio de comportamiento por parte de la industria. Y solicitan el apoyo de las entidades nacionales, provinciales y municipales para brindar medidas que logren que la industria pueda continuar con su labor y pueda mitigar el impacto económico.
“Queremos llamar la atención sobre la urgente necesidad de no descuidar la protección del ambiente mediante el uso de las mejores tecnologías disponibles ya existentes en las industrias y en los diversos sectores de la economía, tanto en el medio urbano como en los del campo y las actividades extractivas”, advierten desde la Cámara Empresaria de Medio Ambiente (CEMA).
En suma, lo que más preocupa es que el escenario es incierto, a pesar de que desde el Gobierno se anunciaron medidas paliativas para la economía.
De todas maneras, los referentes del sector son optimistas y consideran que esta pandemia debe servir, además, para generar una mayor conciencia social frente a la gestión ambiental que permita encaminar soluciones a aspectos pendientes en materia de resguardo y objetivos de desarrollo sostenible.