Don Antonio Gómez Muñoz nació en Cherín, España, un 25 de marzo de 1928, llego a la Argentina en el año 1929 y con su familia vivió en la provincia de Mendoza y San Nicolas provincia de Buenos Aires, y un 25 de marzo de 1946, a los 18 años se incorporaba a la empresa Mac Donalds Seguros, iniciando así una prestigiosa y exitosa carrera en el campo del seguro.
Futuro Sustentable entrevisto a Don Antonio, Director Titular y Presidente Honorario de TPC Compañía de seguros SA, cuya valiosa experiencia nos permite tener una mirada retrospectiva y un balance actual sobre nuestro sector, que ha venido creciendo y modificándose con el correr de las décadas, pero al cual todavía le queda mucho potencial para aprovechar.
¿Cuáles fueron sus comienzos en el sector de las aseguradoras?
Mi vida con el seguro empezó el día que cumplí 18 años, el 25 de marzo de 1946, cuando me incorporé a la empresa Mac Donalds Seguros (como corredor de seguros y representante de aseguradoras inglesas). A lo largo de estos 70 años ininterrumpidos de profesión, en los que mi actividad principal fue siempre el seguro, también participe en diversas empresas en otras áreas, como por ejemplo el sector industrial, financiero, de la construcción, entretenimientos y servicios. Durante este tiempo tuve la oportunidad de conocer el seguro desde casi todos los “lados del escritorio”: como corredor de reaseguros, desde la compañía de seguros, como consultor, como bróker y en compañías de reaseguros.
Entre otras tantas funciones y cargos, fui también socio fundador y primer Presidente del Club de Aseguradores en los años 70 e integré con activa participación diversas comisiones en la Asociación Argentina de Compañías de Seguros entre los años ’50 y ’70. EN 1949 participé de la fundación de la compañía de seguros ARGOS, en la que trabajé durante 27 años, retirándome de la misma como Director General (cargo que ocupé durante los últimos 10 años).
Luego tuve un paso muy breve por la aseguradora FEBO (del Grupo Patria) y también por MINERVA (de un gran amigo, Jorge Castorina), hasta que decidí independizarme y fundé, en 1980, SAN SEGUR (bróker de seguros) que se convirtió en una empresa líder del sector de seguros de ahorro previo y de bancos provinciales.
¿Qué nos puede contar en cuanto a las etapas y contextos profesionales que le tocó atravesar en estos años?
En lo referente a los reaseguros, fui testigo de todas las etapas que atravesó la Argentina, desde un mercado libre, pasando por el IMAR y el INDER, hasta un sistema hoy local y cerrado. En 1995 fundamos SAN PACIFIC, que fue la primera consultora tipo “TPA” de Argentina dedicada exclusivamente al tema de la responsabilidad profesional médica, brindándole servicios a más de 15 compañías de seguros, tanto en Argentina como en varios países de Sudamérica.
En el año 2001/2002, cuando todos querían irse de Argentina, decidimos fundar una compañía de seguros, TPC, de la que fui socio fundador y primer presidente. La compañía comenzó a operar formalmente el 1 de enero del 2003. Hoy sigo siendo accionistas y director titular, y tengo el honor de ser el presidente honorario. Ya en el año 2012, acompañando la evolución del mercado y como una decisión estratégica en nuestro grupo, fundamos NRE compañía de reaseguros SA.
No puedo dejar de mencionar que me llena de alegría y orgullo que 5 de mis nietos hoy forman parte de la tercera generación de aseguradores, ya que en forma paralela a sus estudios y carreras, desarrollan funciones en las compañías vinculadas a seguros en las que la familia Gómez participa.
¿Cómo ve al mercado de hoy en día?
El mercado hoy, comparado con el que yo conocí cuando me inicié, es mucho más sofisticado en lo que hace a productos, coberturas, etc. En aquellos tiempos había unos pocos expertos o especialistas por ramos, en cambio hoy, gracias a la expansión de la industria (primas, compañías, tipos de seguros, gente, etc.) existen muchos. Recuerdo que cuando yo trabajaba en la compañía Argos me llamaban de una empresa colega para pedirme sugerencias de tasas para un seguro de transporte, porque la mayoría de esos seguros en el mercado lo suscribía yo. Seguramente lo que más cambió en este negocio y sobre todo en la forma de hacer negocios, es la tecnología. En mi época usábamos el teléfono y el telex, después fax y más tarde mails. En aquellos tiempos se pedía una tasa a Londres para suscribir un determinado riesgo y la información la mandábamos vía marítima y aérea. Hoy las comunicaciones le dan una velocidad increíble a todo.
Lo que no creo que haya cambiado tanto es la cultura aseguradora. Creo que el público en general aún tiene poca conciencia sobre la importancia de contratar un seguro como medio idóneo para cubrir su patrimonio, el de las empresas y el de las familias. También hay que reconocer que durante mucho tiempo las compañías de seguros no hicieron prácticamente nada en esta área; y por el contrario el hecho de que decenas de ellas hayan desaparecido tampoco ha ayudado a la imagen del seguro como vía de protección en el tiempo. Veo que esto desde hace algún tiempo viene cambiando y que hay aseguradoras que invierten en educar e informar. La iniciativa de la SSN llamada “El seguro va a la escuela”, fue buena como tal, hay que ver el cómo, a quién y durante cuánto tiempo funcione, pero es una acción positiva y en el buen camino.
¿Qué momentos fueron los más trascendentales de su historia profesional? Seguramente hay 3 momentos que fueron los más importantes en mi vida con el seguro. El primero en la compañía de seguros ARGOS, en la que estuve desde su fundación en el año 1949 y durante 27 años, retirándome de la misma como Director General, luego en el bróker de seguros SAN SEGUR, que fundé en el año 1980, y más adelante en TPC, compañía de seguros que como accionista mayoritario y Presidente fundador, impulsé en el año 2002, en plena crisis Argentina.
¿Cómo es su actividad profesional en el presente?
Actualmente soy accionista de NRE Compañía de Reaseguros SA y Director Titular y Presidente Honorario de TPC Compañía de seguros SA, empresa a la que concurro tres o cuatro días a la semana para participar activamente en las reuniones de directorio, siempre dispuesto a compartir mi experiencia y conocimientos, y a responder, cuando es necesario, algún consejo de mi equipo.
¿Cuál es el mensaje que quisiera transmitir a las jóvenes generaciones de profesionales?
Después de haber visto de todo en estos 70 años podre decir que viví con-para-y-del seguro, lo que le diría a todo hombre vinculado con la actividad aseguradora es lo que le diría a todo hombre de negocios y esto es que sean profesionales en lo que hacen, que respete la palabra y que trabaje con pasión.