Durante el primer trimestre de 2021, los equipos de fiscalización de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) inspeccionaron a más de 600 establecimientos industriales, comerciales o de servicios y actividades, radicados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los 14 municipios de la Cuenca, con el objetivo de verificar que su producción se ajuste a la normativa ambiental vigente y poder controlar la contaminación de origen industrial y sus posibles impactos sobre el territorio.
En cada una de las inspecciones, se constata el avance y cumplimiento de los Planes de Adecuación, además de controlar la documentación, la gestión y el retiro de residuos peligrosos y domiciliarios. También, se extraen muestras de efluentes líquidos y, en ocasiones, también del suelo, y de diferentes puntos de interés, que luego son analizados para corroborar que se encuentren en sintonía con los parámetros establecidos por la normativa ambiental.
En el caso de generación de un impacto negativo en el aire, suelo y/o agua, el establecimiento es declarado Agente Contaminante.
Por último, en 2021, el organismo logró que, luego de acompañar los procesos de mejora en su producción, dos empresas resulten excluidas de la categoría de contaminantes.