En el marco de un operativo nocturno de inspección, controladores de la Dirección de Fiscalización y Adecuación Ambiental de ACUMAR clausuraron dos establecimientos en el municipio de Lanús que realizaban vuelcos no tratados a los desagües pluviales y no contaban con tratamiento de residuos especiales.
Uno de ellos se dedica a la elaboración de entretenimiento para mascotas; y el otro, al rubro galvonoplastía. Ambos casos presentaron conexiones irregulares con cañerías que transportaban efluentes provenientes de la producción y que eran derivadas directamente a los desagües pluviales sin ningún tipo de tratamiento, lo que originó la clausura total.
Ninguna de las dos firmas pudo presentar documentación reglamentaria, habilitaciones provinciales y municipales, permisos de vuelcos y de generadores de residuos peligrosos.
Según la nueva normativa, las firmas tienen cinco días hábiles para presentar un descargo formal y a partir de esa fecha comienzan a correr los plazos para la presentación de un plan de adecuación y la posterior evaluación para levantar las clausuras.
Ambas empresas se ubican sobre la calle Maza, entre Coronel Molinedo e Itapiru.