El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) aprobó un paquete de medidas de seguridad, ideadas tras el accidente de Fukushima en 2011, para su aplicación en las centrales nucleares españolas de Vandellós II y Ascó I y II.
Las modificaciones previstas se suman a las que se acordaron en la última reunión del CSN en relación con las instalaciones de Almaraz, Trillo y Cofrentes. Las modificaciones aprobadas prevén la puesta en marcha de Centros Alternativos de Gestión de Emergencias, junto con otras mejoras..
La idea es que a partir del próximo día 30 de noviembre todas las centrales nucleares españolas dispongan de estos nuevos centros para poder gestionar situaciones de emergencia en caso de accidentes severos.