La sequía de los ríos Paraguay y Paraná está repercutiendo en la navegación del país sudamericano, que mueve el 75 % de su comercio exterior a través del transporte fluvial y cuyas embarcaciones transitan ante esa circunstancia casi a la mitad de su carga y con dificultades para entregar las mercancías a tiempo.
Este último amaneció el jueves con un centímetro más de agua que el viernes a su paso por Asunción, tras las lluvias de las últimas horas, aunque todavía 48 centímetros por debajo del cero hidrométrico.
Y por debajo también del mínimo de 1969, cuando se registró una mínima de 40 centímetros por en cuanto a ese nivel.
El bajo caudal “afecta considerablemente a la navegación de las embarcaciones que transportan la carga de importación y exportación”, dijo a EFEverde el presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (Cafym), Esteban Dos Santos.
“Estamos con restricciones de profundidad en el río Paraguay, en los pasos críticos de 2,10 metros. Muy pocas embarcaciones pueden navegar con ese calado”, señaló Dos Santos.
Fuente: EFEverde