Las bajas temperaturas que se vienen registrando en todo el país elevaron el consumo residencial, por lo que las industrias recibieron la instrucción de bajar su uso del gas a los mínimos técnicos necesarios para no afectar las instalaciones. La escasez gasífera se acentuó porque por razones climáticas se demoró el ingreso de un buque de gas natural licuado (GNL) desdel puerto de Bahía Blanca.
Además de las industrias, todas las centrales térmicas que pueden operar con combustibles recibieron órdenes de no utilizar gas. En el comité de crisis que conforman los funcionarios del Enargas y distribuidoras y transportistas por ahora no se menciona la opción de recurrir a cortes de gas natural comprimido (GNC) para vehículos.
Según la última proyección sobre el transporte de gas publicada, el viernes pasado el Enargas calculó una demanda prioritaria (hogares, pequeños comercios, hospitales) de 83,8 millones de metros cúbicos (m3). Ese dato fue luego actualizado a 89,6 millones de m3. Se esperan nuevas precisiones.