Mastellone Hnos., que desde hace 90 años trabaja para ofrecer al mercado productos lácteos que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los consumidores, expresó su preocupación por la disminución del consumo de lácteos, la desinformación y los rumores que circularon respecto de la leche.
Por eso, en 2018, La Serenísima decidió hacer una encuesta ómnibus con Kantar – Division Insights para entender si el público conoce la recomendación diaria de lácteos, si efectivamente los consume y con qué periodicidad. Además, se abordaron algunos de los mitos más recurrentes sobre estos alimentos.
Con los resultados obtenidos, la compañía convocó a la reconocida Dra. Mónica Katz para que pueda dar su punto de vista en el tema y a la Lic. en Nutrición Silvina Tasat, también de amplia trayectoria,
para que pudiese presentar al alimento desde una mirada científica.
EL ESTUDIO
Estudio “Los argentinos y el consumo de lácteos”
Kantar – Division Insights para Mastellone Hnos.
Encuesta Ómnibus, 1205 casos, abordaje online, muestra representativa de la población
adulta de la Argentina.
Universo: hombres y mujeres de 18 años y más, residentes en todo el país, de niveles
ABC1, C2C3, D1D2.
Fecha de campo: entre el 19 de septiembre y el 2 de octubre 2018.
Análisis de resultados:
¿Cuántas porciones de lácteos consumís diariamente, si es que lo hacés?
86% de la población argentina consume menos porciones de lácteos que lo
recomendado por el Ministerio de Salud.
Los niveles socioeconómicos más altos son los que más consumen lácteos.
El volumen consumido no cambia de acuerdo a la región.
¿Sabías que se recomienda consumir 3 porciones de lácteos al día?
Apenas 33% de los argentinos saben que se recomienda consumir 3 porciones de
lácteos.
El conocimiento de la ración diaria recomendada es mayor entre mujeres y entre
los de +65 vs. los de 18 a 24 años.
Equivalencia de 1 porción: 200 ml de leche, 200 cc de yogur y 30 g de queso.
¿Cuánto saben los argentinos sobre lácteos?
9 de cada 10 argentinos reconocen como falso que la leche sea un producto solo
para niños.
Asimismo, 7 de cada 10 saben que es falso que los lácteos aumenten el riesgo de
padecer osteoporosis y puedan generar caries.
6 de cada 10 consideran que no existe asociación entre consumo excesivo de
lácteos y mucosidad y asma.
Sin embargo, es muy alta la proporción de argentinos que cree que los intolerantes
a la lactosa no pueden consumir lácteos.
En cuanto a la comparación de leche y extractos de semilla, almendra y soja,
prima el desconocimiento.
Consumo de lácteos desde la ciencia – Lic. Silvina Tasat
La leche es el primer alimento que consume el ser humano luego del nacimiento.
Priorizando siempre la lactancia materna, la incorporación de la leche de vaca en la
alimentación infantil es fundamental durante el período de crecimiento y desarrollo del niño,
así como también durante todas las etapas de la vida.
Las Guías Alimentarias para la Población Argentina recomiendan el consumo de 3
porciones de lácteos al día en todas las etapas de la vida a partir de los 2 años.
La leche ocupa un lugar muy importante en la alimentación humana. Tiene una finalidad
nutricional ya que posee una composición óptima de nutrientes que responden a las
necesidades de macro y micronutrientes (Hidratos de Carbono, Proteínas, Grasas,
Vitaminas y Minerales).
Posee también una finalidad psicológica y sociocultural, donde las nociones de placer,
gusto, hábitos e identidad, asociados al simbolismo de primer alimento consumido, juegan
un papel fundamental en la evolución y desarrollo del ser humano.
Situación grupo de 18 a 24 años
Es realmente alarmante el bajo consumo de lácteos registrado en la franja etárea de 18
a 24 años, sabiendo lo importante que es su consumo en la prevención de la osteopenia y
osteoporosis.
Existen diversas causas entre las que se incluyen:
Comienzan una nueva etapa de sus vidas, con estudios universitarios y/o trabajo,
donde consumen alimentos por elección y sin tanta supervisión por parte de los
padres o cuidadores.
Muchas veces saltean desayuno y/o merienda por estar fuera de casa, perdiendo
así la posibilidad de incorporar leche en estos momentos más habituales de
consumo.
Declaraciones FE.PA.LE (Federación Panamericana de Lechería):
Aprueba las siguientes declaraciones sobre la importancia de la leche de vaca como
alimento fundamental en la alimentación humana:
Alimento más completo para el ser humano
por sus incomparables características nutricionales.
Es fuente de Proteínas de alto valor biológico, Vitaminas, Minerales y es la fuente,
por excelencia, de Calcio de la más elevada biodisponibilidad.
Posee nutrientes exclusivos para el crecimiento y desarrollo de los niños como
Calcio, Zinc, Magnesio, Potasio, Fósforo, Vitamina D y Vitaminas del complejo B.
Esencial para la formación y mantenimiento de los huesos, dientes y masa
muscular, por su aporte de Calcio, Vitamina D, Fósforo y Magnesio.
Algunos beneficios de los lácteos:
Presentan estrecha relación con la prevención y tratamiento de las enfermedades
crónicas
no trasmisibles como Obesidad, Diabetes, Hipertensión Arterial, Dislipemias,
Síndrome Metabólico y Osteoporosis.
Rehidratan y reponen depósitos musculares de proteínas luego de la actividad
física.
Previenen las caries dentales.
Dada la naturaleza de su matriz, la leche es un excelente vehículo de nutrientes
como Vitaminas, Minerales, Ácidos Grasos Esenciales, Omega 3, Fibras
Fermentables, a través de procesos de fortificación.
ENTONCES, ¿ES VÁLIDO LLAMAR LECHE A LAS BEBIDAS VEGETALES PROVENIENTES DE SEMILLAS O LEGUMBRES? Definitivamente no.
Derribando mitos:
Los humanos son los únicos mamíferos que consumen leche en la edad adulta, de otras
especies, sin necesidad de consumirla: falso.
Las personas con intolerancia a la lactosa no pueden consumir lácteos: falso.
La leche produce mucosidades y alergias: falso.
La leche produce caries dentales: falso.
El consumo de leche produce cáncer: falso.
La leche no previene la osteoporosis: falso.
Es mejor consumir leche orgánica o ecológica: falso.
La leche contiene antibióticos: falso.