Mauricio Macri cerró con un almuerzo en Houston ante buena parte de la crema del negocio petrolero mundial la primera etapa de su gira estadounidense, que tuvo su cita más importante en un almuerzo con Donald Trump, la primera visita de un presidente argentino al salón oval de la Casa Blanca desde 2003.
Parado en un pequeño estrado de madera, con la bandera de Estados Unidos a su derecha y la argentina a su izquierda, Macri llamó a las empresas a invertir en el yacimiento de Vaca Muerta, en Neuquén. Los empresarios, que habían pagado entre US$ 5.000 y US$ 1.000 para convertirse en sponsors del evento, escucharon lo que querían escuchar.
El Presidente les dijo: “Necesitamos que las mejores empresas vengan a la Argentina a desarrollar el potencial energético. YPF está buscando buenos socios para operar, pero si el socio quiere operar por sí mismo, que opere, acá van a trabajar empresas argentinas y extranjeras”.
Macri se refería al desarrollo de Vaca Muerta, el yacimiento neuquino que, según aseguró más tarde a la prensa el ministro de Energía, Juan José Aranguren, recibirá este año entre 6.000 y 8.000 millones de dólares en inversiones y llevará esa suma a los 21.000 millones anuales en 2021.