La expo se realizó el pasado 27 de Octubre en el predio de la ex Sociedad Rural de Rosario, y contó con la presencia del Intendente de Rosario, Pablo Javkin y en el cierre de la jornada estuvo el Ministro de la Corte Suprema de Justicia, el Dr Ricardo Lorenzetti.
Es la primera vez en el país que se realiza una exposición que trata puntualmente la actividad del tratamiento de los residuos industriales, peligrosos y patógenos. El evento contó con más de 40 expositores, más de 20 panelistas y 200 inscriptos. Y estuvo enfocado en concientizar sobre el tema y fundamentalmente informar sobre la actividad en la republica argentina.
La actividad fue organizada por la Cámara Argentina de Industrias de Tratamiento para la Protección Ambiental (CAITPA) y la Cámara Argentina de Tratadores y Transportistas de Residuos Industriales y Especiales (CATRIES) y contó con el apoyo de la Universidad de Económicas de la UBA, a través de Geo( Centro de Desarrollo Sustentable), la UTN( Universidad Tecnológica Nacional), la Municipalidad de Rosario y el Gobierno de Santa Fe.
Durante la apertura, el secretario de Producción de Rosario, Sebastian Chaile, destacó que es clave que la temática ambiental esté alienada a la agenda productiva de las ciudades y que los municipios trabajen iniciativas relacionadas al cuidado y preservación del ambiente.
El primero de los paneles se dedicó al análisis del sector y su futuro, con la participación de Claudia Kalinec, presidenta de CATRIES y Grupo Pelco; y Gustavo Solari, presidente de la CAITPA. En ese marco, Kalinec contó: “El sector viene en continua innovación y desarrollo para incorporar nuevas tecnologías al momento de tratar la generación de residuos que se generan en el país. Durante la pandemia nos transformamos en un jugador clave y esencial a raíz de los residuos patogénico lo que hizo generar una conciencia aún mayor de la importancia que el sector crezca, evolucione y se potencie en el país”.
Por su parte, Solari fue contundente: “Todos los actores del sector nos estamos ocupando de tratar bajo estándares internacionales ese 10% que hace bien las cosas, pero pero es clave ponernos a trabajar en forma articulada sector público y privado en ese 90% restante que termina en un basurero ilegal e impacta directamente en la agenda de cambio climático que tanto preocupa acá en Argentina y en el resto del mundo”.
Más tarde, Matías de Bueno y Graciela Klekailo, de la Universidad Nacional de Rosario, dieron detalles del importante trabajo que están desarrollando para dimensionar el impacto de la contaminación ambiental producto de la bajante histórica del río Paraná y los incendios en el Delta. En ese sentido, destacaron que es fundamental el plan Arbolar, que se propone plantar un millón de árboles en 2030.
En otro panel, el foco estuvo puesto en la agenda sobre cambio climático. Pilar Bueno Rubial, subsecretaria de Cambio Climático y Transición Ecológica Justa de Rosario, destacó el proceso de implementación y monitoreo del Plan Local de Acción Climática Rosario (PLAC), que incluye la elaboración de mapas de riesgo y un inventario de emisiones de Gases de Efecto Invernadero.
Para hablar de la gestión de los residuos cotidiana desde una mirada pública y privada, se conformó un panel en el que dialogaron Cecilia Álvarez, del Municipio de Rosario, y Pablo Corsalini acerca de los desafíos de generar conciencia en los ciudadanos en temas de reciclaje, arboleda y el tratamiento correcto de los residuos hogareños.
Asimismo, otro aspecto clave debatido fue el futuro de la Argentina en relación a la llamada “huella de carbono” y a los “bonos verdes” de compensación, como herramientas no sólo de preservación, sino también de generación de divisas.
El cierre del encuentro estuvo a cargo de Lorenzetti, quien expuso la problemática de la contaminación en su último libro “El Nuevo Enemigo. El colapso ambiental. Cómo evitarlo”, en el cual plantea una gran convocatoria a amplios sectores de la sociedad argentina a preocuparse e involucrarse en enfrentar un problema de carácter universal que afecta a todos por igual y reflexiona acerca de qué depende de las autoridades en el diseño de políticas de Estado, pero también de la acción individual cotidiana.
Y es que, desde su visión, el panorama no es el mejor. “Nuestra salud está siendo afectada. Mejora gracias a los extraordinarios avances de la medicina, pero empeora gracias al deterioro del entorno: cambios climáticos, radiación, migraciones de insectos y virus, el estilo de vida enferma. Las ciudades y pueblos donde vivimos están cambiando; han sido diseñadas en función del automóvil, pero ya no es posible la circulación de tantos vehículos que contaminan; hay ciudades diseñadas en función de las personas, donde la circulación es mediante el transporte público y predomina el silencio”, detalló.
Por eso, concluyó proponiendo un “pacto verde”, como el que se realizó en Europa: “Consiste en no aceptar productos que provienen de zonas deforestadas. Es por ello que Argentina debe cambiar, porque si no seremos propietarios de una materia prima que nadie querrá comprar a nivel mundial, los grandes proyectos tienen cláusulas ambientales”.