En momentos en que la Legislatura rionegrina acaba de ingresar el proyecto para la producción de Ley de Hidrógeno Verde,
el Consorcio para el Desarrollo del Hidrógeno en la Argentina (H2AR) compartió los resultados del primer informe hecho en conjunto con 50 empresas. En este estudio concluyeron que Argentina “tiene un gran potencial para desarrollar una estrategia de producción dual de hidrógeno limpio” para reducir la emisión de carbono.
Esta producción dual se divide, por un lado, en el reformado de gas natural con captura de emisiones de carbono, que ya tiene costos competitivos. Según el informe, se plantea que este costo podría ser de 1,40 a 1,80 dólares por kilo, considerando precios de gas natural entre 3 dólares a 5 por millón de BTU respectivamente. Por el otro, se espera que el hidrógeno verde alcance paridad económica en 2030, con un valor entre 1,50 y 1,60 dólares.
De esta forma, aseguraron que los costos proyectados ubican a la Argentina en una “excelente posición” para “atraer inversiones e incorporarse a la cadena de valor global que se está desarrollando”. A su vez, la proyección de costos podría “acelerar la adopción de tecnologías de hidrógeno y su masificación, sobre todo para la industria y la movilidad”.
El proyecto de iniciativa privada para la producción de Hidrógeno Verde en la localidad rionegrina de Sierra Grande ingresó a la Legislatura provincial para su tratamiento en la próxima sesión extraordinaria.
La empresa australiana Fortescue había anunciado en noviembre pasado una inversión en el país por US$ 8.400 millones para producir hidrógeno verde en una planta emplazada en la mencionada localidad, que en una primera etapa productiva alcanzará -hacia 2028- una capacidad que duplicará lo asignado por el Plan Renovar, que se puso en marcha en julio de 2016.
En línea con esto, el consorcio H2AR asegura que, en la segunda mitad de esta década, “los escenarios más optimistas” estiman que “la industria tendrá oportunidades para el hidrógeno limpio”, principalmente en los sectores de amoníaco, metanol, refino y acero”.
A su vez, durante este periodo señalaron que la movilidad saldrá beneficiada: “los trenes regionales y camiones de alto tonelaje a hidrógeno podrían alcanzar la paridad de costos con las tecnologías actuales de combustión interna de otros combustibles”. Expresaron también que sólo serían competitivos los camiones eléctricos a batería, pero en segmentos de corta distancia.
Otro de los hallazgos apunta a que con el reformado de gas natural con 90% de captura y almacenamiento de CO2, podría reducir el 66% de emisiones equivalente de carbono. En el caso del Hidrógeno a partir de electrólisis renovable del agua, conocido como hidrógeno verde, la reducción en emisiones de CO2 equivalente es de 100%.