En el marco del Acuerdo San Juan, una convocatoria multisectorial y ciudadana del gobierno de Sergio Uñac, que incluye a más de 70 sectores de la economía, la ciencia, la cultura, y la salud entre otros, para en conjunto delinear un esquema de trabajo post pandemia y planificar las políticas de Estado para los próximos 10 años, la minería planteó objetivos y condiciones para el desarrollo. Al respecto, el presidente de la Cámara Minera de la provincia, Mario Hernández, habló con Sabrina Pont y Pablo Gago en Futuro Sustentable radio por AM 1220.
¿Qué propone el sector minero en el marco del Acuerdo San Juan?
Desde el sector minero, de acá al 2030, la gran oportunidad que tiene San Juan para un cambio de escala en materia minera es poner en marcha los cuatro pórfidos de cobre, que son Josemaría, Pachón, Altar y Los Azules. Se está trabajando para eso, son inversiones grandes pero fundamentalmente son proyectos que conllevan una gran participación social en cuanto a la masa de trabajadores y en cuanto a cómo pueden participar las empresas proveedoras de bienes y servicios.
Por ejemplo, necesitaríamos producir cales dos veces y media más de lo que hoy tenemos en producción en la provincia. Es también en ese sentido una enorme posibilidad para el sector minero no metalífero. Una de las aspiraciones de este Acuerdo San Juan es que la provincia tenga un 70% de empleo privado y un 30% estatal.
¿Por qué hoy es una oportunidad de desarrollo la minería de cobre?
El mundo avanza hacia un nuevo paradigma energético. Y estas nuevas energías necesitan de más minería. Y en este sentido el cobre va a tener una gran participación, y también los subproductos de estos grandes pórfidos que son el molibdeno, el oro y la plata. No solo para la fabricación de los nuevos generadores de energías limpias. La necesidad de cobre que tiene un auto eléctrico va a ser mucho mayor que la de un auto a combustión.
Aquellos que piensan un mundo verde sin minería, les digo que es todo lo contrario. Van a ser necesarios más metales. En ese sentido, pensar en sociedades limpias implica pensar en mayor producción de cobre; el mercado lo ha leído así para la post pandemia, el precio internacional del metal está en alza y hace que sea posible factibilizar los proyectos explorados. Es más, creo que va a superar los u$s 3. Es sin dudas una gran oportunidad.
Con los cuatro pórfidos de cobre en marcha en 2030, San Juan podría exportar un 300% más de lo que exporta; eso significaría para la economía de la provincia la generación de una coparticipación y media más solamente por el movimiento minero.
¿Cuáles son las condiciones para que se logren estos objetivos?
La previsibilidad fiscal es lo que más impacta en el desarrollo. Actualmente la exportación de oro tiene una retención del 12%; ya que si bien está establecido que sea el 8% todavía faltan las reglamentaciones y por eso aún no se pudo poner en práctica esa medida. Pero además recordemos que la minería tiene una carga tributaria del 55% del valor de las ventas y hay que buscar un equilibrio regional. En Chile y Perú tienen tributaciones cercanas a un 45% sobre las ventas. Esto no significa que la minería este pidiendo no pagar retenciones, creo que hay que buscar un mecanismo de retenciones móviles para que los proyectos sean factibles, es decir para que puedan tener una factibilidad positiva y se decida la inversión.
¿Esto no excede a las decisiones que puede tener San Juan y requiere un acuerdo más amplio con Nación?
Exactamente. Todos los sectores están pidiendo que haya una articulación con el Gobierno nacional. Esta la idea planteada también desde la administración de Alberto Fernández de llevar adelante una mecánica “proyecto por proyecto” para impulsar el desarrollo de los más avanzados que podrían llevar al país a exportar minerales e igualar los niveles de exportación de soja por ejemplo.