A través de su Departamento Ambiental, el ENRE fiscalizó los instrumentos de medición de emisiones de contaminantes gaseosos de la Central Térmica Luján de Cuyo, la mayor de su tipo en Mendoza y en la región cuyana. Los inspectores del organismo evaluaron el rendimiento de los equipos y los datos recolectados, según la normativa que la Secretaría de Energía de la Nación establece para los agentes generadores eléctricos.
Ubicada en el Parque Industrial Provincial de Mendoza y operada por Central Puerto, esta central térmica posee una potencia instalada de 614 MW. Sus unidades Turbovapor, turbinas de gas y ciclos combinados contribuyen a la cogeneración de vapor destinado a la destilería Luján de Cuyo de YPF.
Por su potencia instalada y por el tipo de combustibles que quema, la Central Térmica Luján de Cuyo debe acatar la normativa ambiental que las autoridades nacionales definieron en base a normas internacionales, y que supone la implementación de un monitoreo continuo de emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), dióxido de azufre (SO2), oxígeno (O2) y material particulado total (MPT).
En el marco de la auditoría mencionada, especialistas del ENRE verificaron el estado, funcionamiento y mantenimiento de los equipos de medición de emisiones gaseosas en las chimeneas de las unidades Turbovapor. A la hora de analizar la consistencia y trazabilidad de los datos procesados por el Sistema de Monitoreo Continuo de Emisiones Gaseosas (SMCE), le prestaron especial atención a la nueva aplicación que Central Puerto desarrolló para enviar esta información al ENRE, en el marco de su Sistema de Gestión Ambiental (SGA).
A propósito de la auditoría, el Interventor Walter Martello aseguró: “Desde nuestro Ente Regulador colaboramos con el cuidado del medio ambiente auditando los sistemas de monitoreo de emisiones contaminantes de las empresas generadoras. En este sentido también usamos todas las herramientas disponibles para hacer cumplir la normativa vigente”.