La mayoría de los árboles y los arbustos europeos son dispersados por las aves en sus ciclos migratorios hacia latitudes más cálidas en el sur, pero el cambio climático alteraría esos procesos y podría condicionar la composición de los bosques del futuro, según comprobó un equipo de científicos de trece centros de investigación europeos, liderados por investigadores españoles del Departamento de Biología de la Universidad de Cádiz.
Este equipo publicó sus conclusiones en la revista Nature. Los trabajos fueron llevados a cabo en áreas forestales localizadas en Portugal, España, Reino Unido, Alemania, Italia y Polonia, e incluyeron un total de 46 especies de aves y 81 de plantas. Esto permitió concluir que los “óptimos climáticos” de muchas especies están en desplazamiento hacia latitudes más frías, lo que fuerza la redistribución de la vida en la Tierra.
La movilidad permite a los pájaros desplazarse hacia áreas con climas apropiados, pero no a las plantas, por lo que la dispersión de las semillas a larga distancia que protagonizan las aves es clave en los procesos de cambio de distribución y adaptación, según han observado los investigadores, que subrayaron la importancia de estos resultados para comprender, detener y mitigar las pérdidas futuras de biodiversidad debidas al cambio climático.
El estudio reveló que el 86 % de los árboles y arbustos europeos son dispersados por las aves cuando migran hacia áreas más cálidas en otoño, mientras que sólo el 35 % de las plantas son distribuidas por los pájaros que migran hacia el norte en primavera, según informó la Universidad de Cádiz en una nota difundida ayer.
El trabajo se centró en comunidades de aves que consumen los frutos y dispersan las semillas de comunidades de plantas.
“Un pájaro que ingiere un fruto mientras se encuentra en migración tiene el potencial de dispersar sus semillas a larga distancia, confiriéndole la posibilidad de colonizar nuevos territorios; pero si esas semillas viajan hacia el sur, están yendo en la dirección equivocada en términos de adaptación al cambio climático”, declaró Beatriz Rumeu, investigadora en la Universidad de Cádiz y co-autora del estudio.
Fuente: www.efeverde.com