Indra, compañía global de tecnología y consultoría, y la Xunta de Galicia finalizaron el desarrollo de la primera embarcación no tripulada/telecomandada del mercado diseñada para monitorizar la calidad de las aguas y proteger los caladeros y la biodiversidad de las zonas de costa.
El sistema se desarrolló dentro del Programa de Soluciones MAR 2 de la Civil UAV’s Initiative que dirige la Agencia Galega de Innovación (GAIN). Este dron naval realiza mediciones de la calidad del agua de forma autónoma.
Con 10,5 metros de eslora y 3,5 de manga, cuenta con una autonomía de 320 millas náuticas, y está preparada para pilotarse de forma remota desde una estación en tierra o seguir una ruta predefinida de forma autónoma.
A bordo, porta un sistema robotizado con instrumental para recoger muestras de columnas de agua a distintas profundidades en los puntos geográficos predefinidos. También, realiza el filtrado de los diferentes estratos y obtiene muestras de fitoplancton y clorofila, todo ello sin la necesidad de intervención humana.
Toda la información que recoge se transmite a un sistema de información que centraliza los datos y los pone a disposición de los usuarios para su estudio. Almacena además todas las muestras refrigeradas para poderlas trasladar posteriormente al laboratorio.
Indra, que en el ámbito de este proyecto ha trabajado en UTE con Sixtema y Adantia, contó con las empresas gallegas Seadrone y Aimen para el desarrollo del sistema. Seadrone diseñó y dirigido la construcción del barco y desarrollado el sistema de control remoto de la embarcación como el despliegue de sonda oceanográfica multiparamétrica. Aimen ha proyectado y construido el sistema robótico para la toma y almacenamiento de muestras de agua a diferentes profundidades. La construcción se ha realizado por Montajes Cancelas con participación de Amura, Norinvest, Carpinautic y Carper, entre otras empresas locales.
Esta embarcación forma parte de una solución integral de vigilancia medioambiental de las aguas, que se completa con el sistema basado en un dron aéreo multirotor que Indra, Sixtema y Adantia ya desarrollaron este mismo año dentro la primera fase del proyecto Mar2 para analizar las aguas y recoger muestras en embalses.