El secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, afirmó ayer que los proyectos de inversión que presenten las empresas hidrocarburíferas deberán contemplar un “valor agregado nacional creciente” y remarcó que “el nuevo Plan Gas será tremendamente ventajoso en el mediano plazo” por el importante ahorro fiscal y en divisas en los próximos cuatro años.
“Año a año habrá que hacer más en pesos, en desmedro de lo que se hacía en divisas extranjeras y esto lo haremos con un control federal y participativo de provincias, trabajadores, y los ministerios de Producción y de Ciencia y Técnica, porque habrá que desarrollar herramientas que hoy no tenemos”, dijo Martínez en una entrevista con el medio especializado EconoJournal.
El funcionario anticipó que se convocará “al Banco Nación, para financiar desarrollos de empresas nacionales” para animarse “a hacer cosas que hoy no se hacen”.
En referencia al recién lanzado Programa de Estímulo a la Producción de Gas Argentino, Martínez evaluó que “no sirve de nada una situación en la que las empresas pierdan o quiebren, porque entonces no hay inversiones y pasa hay que importar a un costo más elevado”.
El secretario aseguró que se trabaja con “el horizonte a largo plazo para que haya previsibilidad y no contramarchas, ya que las decisiones contradictorias en los últimos años generaron una gran desconfianza en el sector”.
“Las empresas empezaron a dudar sobre la responsabilidad de pago por parte del Estado sobre los estímulos fiscales a la producción de gas, por eso nosotros reafirmamos nuestra vocación de pagos y establecimos la manera en que vamos a dar garantías y seguridad al inversor, lo cual nos permitió bajar algunos puntos el costo fiscal”, señaló.
En ese sentido, detalló que la negociación del precio para las productoras “arrancó en US$ 4 por millón de Btu (unidad térmica británica), se redujo luego a US$ 3,90 y se fue buscando un esquema que permitiera bajar aún más, hasta llegar a un valor presente neto de US$ 3,26 en cuatro años”.
Además, precisó, “nosotros exigimos que inviertan el 100% del estímulo que le vamos a dar, con valor agregado nacional creciente; al comparar el acuerdo con el costo de no hacerlo es tremendamente ventajoso en el mediano plazo, con US$ 5.600 millones de ahorro en divisas en tres años, US$ 9.600 millones en cuatro años y US$ 1.172 millones de ahorro fiscal”.
Como resultados inmediatos Martínez destacó que en los próximos días se pondrán en actividad entre 12 y 13 equipos de producción, de los cuales siete serán de YPF.
El secretario adelantó, por otra parte, que el Gobierno va a “analizar con las nuevas autoridades de Bolivia que el acuerdo de importación de gas, cuya última adenda vence a fin de año, sea cumplible”. y agregó, “Bolivia viene con un declino de producción en cuanto a Argentina y a Brasil, donde también tenemos oportunidad de colocar nuestra producción de gas, para lo cual le vamos a pedir a Cancillería y a Economía que exploren ese mercado.”
“Necesitamos saber por cuántos años nos puede llegar a comprar Brasil y a qué precio para poder tomar el resto de las decisiones sobre un gasoducto para evacuar el gas de Vaca Muerta“, y además “queremos invertir US$ 600 millones para aumentar 10 millones de m3 diarios la capacidad de transporte, sin tener que hacer otro gasoducto, para poder hacer sustitución de importaciones y tener más redes de distribución“.
En materia de inversiones eléctricas añadió que “hay que hacer un trabajo muy importante en cuanto a la distribución para poder bajar los cortes de luz. Ya estamos trabajando con la provincia de Buenos Aires pero queremos tener un horizonte de inversión de dos años para solucionar este problema común en todos los veranos“, concluyó.