China promueve la compra de vehículos eléctricos a través de subsidios gubernamentales, por lo que en los primeros 11 meses del año las ventas alcanzaron las 609.000 unidades.
El crecimiento del 51,4%, comparado con el mismo período de 2016, se da en el marco del XIII Plan Quinquenal 2016-2020, que a partir de 2019 exigirá a los fabricantes de automóviles que el 10% de los vehículos ofrecidos sean eléctricos o híbridos. Este porcentaje se elevará al 12% en 2020, cifra que será revisada en 2021 para establecer nuevas cuotas.
Uno de los objetivos del plan es la creación de una red nacional de puntos de recarga que puedan abastecer una flota estimada a futuro en unos 5 millones de vehículos eléctricos. En términos de infraestructura, la capital china tiene hoy más de 112.600 puntos de recarga de baterías, según cifras de finales de noviembre divulgadas recientemente por las autoridades locales.