Durante un operativo de rutina, un equipo de inspectores de la Dirección de Fiscalización y Adecuación Ambiental clausuró un taller de lavado, teñido y secado de jeans en Valentín Alsina, partido de Lanús.
El establecimiento, que antiguamente funcionaba como curtiembre y actualmente utiliza parte de las instalaciones para el acabado de prendas de jean, operaba sin ningún tipo de habilitación.
Al ser consultados por los inspectores, manifestaron que los líquidos generados eran enviados mediante bomba al predio lindante para luego ser enviados al colector pluvial. Los efluentes, de esta manera se volcaban sin ningún tipo de tratamiento.
Ante ese escenario, el equipo de ACUMAR procedió a clausurar en forma preventiva todo el establecimiento. Se colocaron fajas y precintos en fulones, centrifugadora, secadoras, tableros de energía y llave de gas.
La firma tendrá que presentar un descargo en cinco días hábiles o en su defecto un plan de adecuación que incluya un programa de tratamiento de sus efluentes líquidos.