El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció nuevos recursos para los productores rurales y aplaudió la “limpieza” que se está haciendo en los órganos de fiscalización medioambiental, puestos al mando de policías militarizados.
Fue en el marco de la apertura de la Agrishow 2019, una de las mayores ferias agrícolas del país, en la localidad de Ribeirao Preto, en el interior del estado de San Pablo.
Allí, el mandatario informó que el Banco do Brasil, el mayor banco estatal del país, dispondrá de 1.000 millones de reales (unos 255 millones de dólares) para “invertir” en el sector agropecuario vía créditos para los productores, y otra suma similar para engrosar el fondo del “seguro rural”.
Bolsonaro también se declaró orgulloso de tener un ministro de Medioambiente como Ricardo Salles, quien la semana pasada colocó al frente de Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (ICMBio) a cuatro policías militarizados.
“Una de las medidas tomadas y estudiadas junto con él (Salles) es hacer una limpieza en el Ibama (Instituto Brasileño del Medioambiente y de los Recursos Naturales Renovables) y en el ICBmio”, explicó Bolsonaro.
Al comentar es “limpieza” el mandatario aseguró que “vibró” cuando supo del nombramiento de los cuatro policías en la cúpula de la segunda entidad.
“Tiene que haber fiscalización, pero el hombre del campo tiene que tener el placer de recibir al fiscal y en un primer momento ser orientado para que pueda cumplir con las leyes. Eso es lo que queremos”, añadió.
El jefe de Estado aseguró que alrededor del “40 % de las multas” que los órganos medioambientales imponían a los productores agrícolas eran para “retroalimentar una fiscalización chiita” que “no ayudaba al medioambiente y mucho menos a aquellos que producen”.
Además, anunció que la próxima semana presentarán en el Congreso un proyecto para que el productor rural pueda usar armas “en todo el perímetro de su propiedad”.
“La propiedad privada es sagrada y punto final”, exclamó el mandatario, quien pocos días después de su investidura firmó un decreto a través del cual facilitó la compra de armas a la población civil.