Unos meses después del lanzamiento de su nuevo programa estratégico GreenUp que pretende acelerar su trayectoria de descarbonización, Veolia ha dado un nuevo paso significativo en su estrategia climática al obtener la validación de sus objetivos por parte de la iniciativa Science Based Targets (SBTi), la organización referente en este campo. La SBTi elogió especialmente la meta del Grupo por alcanzar las cero emisiones netas, reconociéndola como la más ambiciosa entre las que monitorea.
En el centro del modelo de acción de Veolia, la descarbonización actúa como una poderosa palanca y una fuente de creación de valor para el Grupo y sus clientes a largo plazo. Este enfoque pragmático y orientado a la acción permite a la compañía mostrar avances significativos en la consecución de sus objetivos, particularmente, en lo relacionado con el programa de 1.600 millones de euros para convertir los activos de producción de energía basados en el carbón a energías menos intensivas en carbono o el desarrollo de energías locales descarbonizantes.
Veolia fue el primer Grupo en mostrar las emisiones evitadas de sus clientes que forman parte del Alcance 4[1], que apoyan activamente la aceleración hacia la transformación ecológica a nivel mundial y, en particular, la descarbonización de las actividades industriales y económicas. En 2023, Veolia contribuyó a evitar 13,8 Mt de emisiones.
Los objetivos de reducción de emisiones validados de la trayectoria climática del Grupo están alineados con la meta de 1,5°C establecida por el Acuerdo de París. Estos objetivos forman parte del programa estratégico GreenUp:
- Reducción del 50% de las emisiones de alcance 1 y 2 para 2032, gracias a la aceleración de sus inversiones para eliminar gradualmente el uso del carbón en Europa y capturar biogás en sus sitios de almacenamiento de residuos.
- Aumento del 50% en las emisiones evitadas para sus clientes (alcance 4) para 2030
- Lograr la neutralidad de carbono para 2050
La agencia de calificación internacional Moody’s también analizó y reconoció la calidad del plan de transición de Veolia, concediendo a la empresa una puntuación global de NZ-2 (en una escala de NZ-1 a NZ-5), elogiando en particular la ambición y la solidez de su implementación en el corto plazo. Esto se basa, en particular, en la movilización de tecnologías probadas por el Grupo y en una rentabilidad superior a la media de las inversiones en transición.
Veolia se convierte así en la primera empresa en obtener una doble validación de sus compromisos climáticos por parte de dos importantes organizaciones internacionales.
“Veolia es un actor importante de la descarbonización y una empresa decididamente orientada a la acción. Con el programa GreenUp lanzado a principios de este año, hemos acelerado el ritmo de nuestros objetivos de descarbonización, cuya credibilidad y solidez se ven ahora reforzadas por la validación SBTi, que reconoce nuestro compromiso con la transformación ecológica”, señaló Estelle Brachlianoff, CEO de Veolia.