Reino Unido podría recibir grandes volúmenes de peligrosos residuos radiactivos, parte de ellos importados del resto de Europa, bajo las propuestas de Bruselas para transferir la propiedad de un abanico de materiales nucleares a Londres cuando abandone la Unión Europea (UE).
Cerca de 130 toneladas (Tn) de plutonio almacenadas en la planta de Sellafield, en Cumbria, se incluirían entre el material nuclear cuyo control pasaría formalmente a Reino Unido.
La postura provisional de Barnier en la negociación, es pedir un acuerdo de Brexit que “garantice, cuando sea conveniente, la transferencia de la propiedad a Reino Unido de los materiales fisibles especiales controlados en la actualidad por Euratom dentro de Reino Unido”.