PUMA desarrolló una versión experimental de su zapatilla más icónica, la SUEDE, con productos que la hacen biodegradable.
La empresa tiene como objetivo satisfacer la creciente demanda de productos sostenibles para un futuro mejor. La RE: SUEDE, que utiliza la última tecnología disponible en la actualidad, estará fabricada con materiales más sostenibles, como gamuza curtida Zeology, TPE biodegradable y fibras de cáñamo.
Con este modela, la marca espera establecer nuevos estándares de sustentabilidad para el icónico calzado. Diseñada para ayudar a abordar el desafío de la gestión de residuos en la industria, la RE:SUEDE permitirá a PUMA asumir una mayor responsabilidad en lo que respecta al abordaje del final de la vida útil de sus productos. La prueba se lanzará en enero de 2022 y ofrecerá a 500 participantes seleccionados en Alemania la oportunidad de unirse a PUMA en este viaje experimental.
En asociación con PUMA, los participantes usarán sus RE: SUEDE durante seis meses para probar la durabilidad de un producto hecho con materiales biodegradables en la vida real, antes de enviarlos de regreso a PUMA a través de una infraestructura de recuperación, diseñada para mover el producto al siguiente paso del experimento.
Luego, las zapatillas se someterán a un proceso de biodegradación industrial en un entorno controlado en Valor Compostering B.V., propiedad de Ortessa Groep B.V., una empresa familiar de especialistas en residuos en los Países Bajos. El objetivo de este paso es determinar si se puede producir abono de grado A para uso agrícola. Los hallazgos ayudarán a PUMA a evaluar el proceso biodegradable y a analizar la investigación y el desarrollo esenciales para el futuro del consumo sostenible de calzado.
RE:SUEDE es el primer programa circular que se lanza en el marco del “Laboratorio Circular” de PUMA, un nuevo centro de innovación dirigido por los expertos en diseño y sostenibilidad de PUMA que trabajan para desarrollar el futuro de los programas de circularidad de la empresa.
“En 2012, nuestra ambición circular era audaz, pero la tecnología no estaba a la altura. Como dicen, con cada desafío hay una oportunidad, y hemos seguido esforzándonos para hacer lo mejor posible, aplicando nuestras fortalezas y reconociendo y mejorando nuestras debilidades”, sostuvo Heiko Desens, directora creativa de PUMA, y agregó: “Esperamos que el progreso realizado durante el experimento RE:SUEDE: ‘No Time For Waste’ nos ayude a seguir elevando la vara en el testeo de circularidad, lo que permitirá a nuestros consumidores tomar mejores decisiones de moda en el futuro, para que sus zapatillas puedan pasar de “gamuza al suelo”’, sin comprometer el estilo del producto o su durabilidad”.