La vaquita marina, el más pequeño de todos los mamíferos marinos, puede desaparecer pronto para siempre. Quedan solo 30 individuos de esta especie en su hábitat natural, por lo que ONU Medio Ambiente la añadió a su campaña ‘Feroz por la Vida’ para pedir acciones inminentes, a propósito de la celebración del Día Internacional para salvar a la Vaquita Marina, el pasado 8 de julio.
Este tipo de marsopa está enfrentando la extinción, principalmente debido a la pesca ilegal de la totoaba en el Golfo de California, en México. La totaba misma es un pez amenazado que tiene los mayores niveles de protección en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES) –no se permite su comercialización-. Sin embargo, sigue siendo capturada debido a la demanda de su vejiga natatoria, principalmente en China.
Las vaquitas se ahogan cuando son capturadas en gigantes redes de enmalle y no pueden alcanzar la superficie para respirar. De acuerdo con un informe de enero de 2017 del Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita, la población había decaído a unos 30 individuos, lo que representa una diminución de más de 90% desde 1997.
El 7 de junio de este año el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció que haría permanente una prohibición a las redes de enmalle en el hábitat de la vaquita, lo que entró en vigor el pasado 30 de junio.