Después de algunos años conflictivos, el viento parece soplar nuevamente a favor de los biocombustibles. Y dos son los factores que parecen favorecerlo.
En primer lugar, el fallo de la OMC a favor de la Argentina en la causa por las tarifas supuestamente antidumping y las prácticas desleales en materia de precios para la comercialización de biodiesel a la Unión Europea, trabas que afectan las exportaciones nacionales desde fines de 2013. En segundo, el incremento de 10% a 12% en el corte de bioetanol en las naftas, algo que afecta positivamente, en especial, a los ingenios azucareros.
Diversas estadísticas privadas y oficiales indican que las exportaciones de biodiesel pasaron de ser USD 2.000 millones en 2011 (el año récord) a USD 500 millones en 2015, cayeron, así, 75%, principalmente por efecto de las medidas europeas.
“Pasaron varias cosas. Hace poco más de dos años, la Unión Europea denunció a la Argentina por presunto dumping y por subsidios a la producción. La OMC falló recientemente a favor de la Argentina, lo que podría reabrir ese mercado”, explicó al matutina Clarín Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara de los Productores de Biodiesel (Carbio). De todos modos, si bien el pronunciamiento del organismo fue favorable, en el sector todavía esperan la resolución de las apelaciones cruzadas, lo cual podría ocurrir entre fines de este año y principios de 2017.
Sea como fuere, en el sector estiman que esta posible reapertura no implica que se vuelva a los niveles de 2011, si bien Europa representó entonces casi 90% de las ventas argentinas, por un valor de USD 1.800 millones. Al día de hoy, están habilitadas unas 35 plantas de gran porte para el biodiesel, con una capacidad instalada de 4,5 millones de toneladas. Con las trabas europeas, en 2015 la industria operó al 40% en general, afectando sobre todo a las empresas enfocadas en la exportación.
“El fallo de la OMC no fue contundente. La sanción se aplicó en función de cálculos de los precios de granos y el panel ordenó que se rehagan. Esto podría demorar todo el año, pero de cualquier modo es muy difícil que veamos los volúmenes registrados años atrás. En 2011 llegamos a exportar 1,5 millones de toneladas solo a Europa. Y, si todo sale bien, podríamos recuperar un mercado de entre 300.000 y 500.000 toneladas”, detalló Andrés Iolster, gerente Comercial para Biodiesel de Cargill, en diálogo con Clarín.