En una campaña histórica, Ledesma alcanzó una producción de 129.500 toneladas de cítricos, un 24% más que el año anterior, cuando la cosecha fue de 104.400 toneladas. Del total producido, el 49% correspondieron a naranjas, el 30% a limones y el 21% restante a pomelos, manteniendo proporciones similares a las del año previo.
La producción proviene de plantaciones propias en Jujuy y Salta, así como de quintas arrendadas en Tucumán. Además, Ledesma compra fruta de terceros para su planta industrial, lo que genera un importante movimiento económico en la región y beneficia a los proveedores locales.
El incremento en la cosecha se atribuye a condiciones climáticas favorables, con mejores lluvias tras tres años de sequía, y al trabajo constante de renovación de plantaciones que lleva a cabo la empresa. Cada año, Ledesma renueva el 5% de sus 3.000 hectáreas de cítricos en Jujuy, un proceso que requiere dos años de vivero y cuatro años de crecimiento para obtener resultados.
Siguiendo el esquema productivo de los últimos dos años, Ledesma destinó un 80% de su producción al segmento industrial y el 20% restante al consumo en fresco. Este cambio en la estrategia de comercialización ha permitido a la empresa aprovechar tendencias de consumo global y acceder a mejores precios.
El mercado internacional de jugos enfrenta una crisis en la oferta debido a la propagación de la enfermedad del greening (HLB) en Brasil, Estados Unidos y México. Esta situación ha favorecido a Ledesma, que logró acceder a precios históricos en el mercado del jugo de naranja. Estados Unidos y la Unión Europea fueron los principales destinos de los aceites y jugos de la compañía, mientras que el mercado interno absorbió un 70% de la producción de jugo concentrado de pomelo.
Con miras a las próximas campañas, Ledesma tiene previstos nuevos proyectos de inversión, incluyendo la construcción de una nueva cámara frigorífica para almacenar jugo concentrado y la ampliación de la capacidad de la planta de molienda en un 30%. Estas mejoras permitirán a la compañía incrementar la compra de fruta a terceros y optimizar el aprovechamiento de su propia producción, consolidando su liderazgo en el sector citrícola.