En relación al anuncio de multimillonarias inversiones que recibirá la Argentina para la producción de hidrógeno verde, dialogamos en AM 1220 con el Ing. Juan Pablo Camezzana, sobre de qué manera sirve la desalinización del agua para extraer el hidrógeno verde. Entrevistado por Pablo Gago y Patricia Marino para el programa Futuro Sustentable, en Eco Medios
Futuro Sustentable: ¿El hidrógeno verde puede ser una solución para reconvertir la matriz?
Juan Pablo Camezzana: Las matrices energéticas en el mundo van evolucionando a matrices más sostenibles. Quizás no tan rápido como deberían, pero lo hacen. El hidrógeno es una de las grandes alternativas que puede marcar un punto de inflexión, pero no es la única. Si bien es una muy buena alternativa, no tiene que ser entendida como la salvadora de la crisis energética mundial, sino que es una de las disponibles para revertir el calentamiento global. La clave del hidrógeno verde tiene que ver con el origen de la energía utilizada para su producción. Cuanto más limpia sea esa energía, más verde será el hidrógeno. Complementando con esto, no solo es necesario energía para producir hidrógeno. También necesitamos agua y de buena calidad.
FS: ¿Qué características tiene que tener esa agua?
JPC: Tiene que tener características particulares, como el agua utilizada en otros procesos industriales. Esas características pueden obtenerse a partir de cualquier fuente de agua. Todo tiene que ver con la cantidad de energía y capital necesario para producir esa agua. Los lugares estratégicos mejor posicionados para producir hidrógeno verde son aquellos que tienen acceso a una fuente de energía renovable y barata, y una fuente de agua lo menos costosa posible. Muchos lugares de la Patagonia reúnen esas características.
FS: ¿Los costos de desalinización son caros hoy en Argentina?
JPC: La verdad es que no son caros ni en Argentina ni en el mundo. Hemos visto en los últimos 10 años una caída muy fuerte de los precios del agua desalinizada a partir de agua de mar. Hoy encontramos tarifas de contrato en el orden de los 50 centavos de dólar por cada mil litros de agua como una tarifa normal, cuando hace años parecía algo agresivo. Incluso, el mundo ha visto contratos de menos de 40 centavos de dólar. Entonces, producir hidrógeno a partir del agua de mar es posible y factible a nivel económico cuando lo ponemos en una matriz donde esas plantas de tratamiento de agua se nutran también de energía renovable. Esa es la mejor combinación y sería un escenario cada vez mejor.