Ayer fue un día poco típico para el Complejo Automotor que posee General Motors (GM) Company en Alvear, provincia de Santa Fe. Sucede que la planta recibió la visita de la CEO de la compañía, Mary Barra, y el presidente Mauricio Macri. ¿La ocasión? La inauguración de la línea de producción del Nuevo Chevrolet Cruze, segunda generación del auto más vendido de la marca en todo el mundo.
Dicha producción es posible gracias a una inversión de USD 740 millones y a una nueva Planta de Motores que alimentará al nuevo modelo a partir de 2017.
Del recorrido del complejo también participaron el presidente de GM Argentina, Carlos Zarlenga; el director de la planta, Claudio Vulcano; el ministro de Producción, Francisco Cabrera; el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el presidente de la Comuna de Alvear, Carlos Pighin; y el secretario General de SMATA Rosario, Marcelo Barros.
Durante la ceremonia, Barra enfatizó que la magnitud del salto cualitativo del complejo en la Argentina, que lo posiciona a la altura de las mejores plantas de GM en el mundo. Asimismo, se mostró confiada en que el Nuevo Cruze continuará siendo el auto más vendido de la marca, ya que se comercializa en más de 115 mercados y será producido en solo cuatro países, la Argentina entre ellos.
Al finalizar su discurso, la presidenta de GM anunció la donación de un Nuevo Chevrolet Cruze a la organización rosarina Njambre para su Proyecto Arbusta, el cual fomenta el desarrollo y la inserción de mujeres y jóvenes en situación de vulnerabilidad social, a través de una formación en sistemas digitales dentro de sus comunidades.
“Me voy contento luego de recorrer la planta, de haber compartido estos momentos con trabajadores orgullosos de la tarea que llevan a cabo. Claramente este es el país que sueño, un país que pone en marcha el motor para arrancar. Gracias por creer y gracias por apostar en el país. Estamos en el camino correcto”, señaló, por su parte, Macri.