La planta que Ford posee en São Bernardo do Campo, Brasil, alcanzó su meta ambiental más importante: eliminar a cero el envío de residuos que son enterrados en los rellenos sanitarios de la región. Así, se complementa lo ya alcanzado por la planta de Taubaté, en el Valle de Paraíba y por la fábrica de motores de Camaçari, en Bahía, que ya habían logrado el mismo objetivo a principio de este año.
Este desafío forma parte del plan global de Ford Motor Company basado en prácticas sustentables, y su resultado viene de la mano de diversas acciones de áreas operativas y campañas de concientización.
“Fue un arduo trabajo de educación e involucramiento de toda la fábrica, incluyendo los empleados de las áreas de producción y administrativas. Este hito representa mucho para Ford y más que eso, para el planeta”, afirmó al respecto Félix Guillen, Director de Operaciones de Ford Sudamérica.
La fábrica más tradicional de Ford, donde son producidos el nuevo Fiesta y las líneas de camiones Serie F y Cargo, eliminó el envío de residuos para enterramiento en junio pasado. A modo comparativo, la ciudad de São Bernardo do Campo envía diariamente cerca de 700 toneladas de residuos domiciliarios para ser enterrados. En Brasil, cada persona produce, en promedio, cerca de 1kg de basura por día.