De acuerdo a datos publicados por Eurostat, los ingresos por tasas verdes en la Unión Europea (UE) en 2014 supusieron el 6,3% de los réditos totales obtenidos por impuestos y sumaron 343.600 millones de euros.
Pese a que, en ese mismo año, los impuestos ambientales generaron unos 64.000 millones de euros más que en 2004 (cuando se obtuvieron 282.000 millones de ingresos por tasas de este tipo), el porcentaje sobre los ingresos totales fue cinco décimas menor en 2014 (6,3%) que diez años antes (6,9%).
El objetivo que se fijó la UE, dentro de su estrategia Europa 2020 para el uso eficiente de los recursos, es que esta cifra llegue al menos al 10%, algo que en 2014 solo consiguieron Eslovenia (10,6%), Croacia (10,5%) y Grecia (10,2%).
Bulgaria (9,8%), Letonia (9,3%), Chipre y Holanda (ambos 9%) estuvieron cerca. En la otra parte de la clasificación se situaron Bélgica y Francia (4,5%), seguidos por Alemania, Luxemburgo y Suecia (todos 5,2%).