El Parlamento Europeo aprobó un reglamento en el que se incluye la prohibición de la pesca eléctrica y que reduce significativamente el número de arrastreros autorizados a practicarla de cara al cese de esta práctica, que será efectivo desde el 1 de julio de 2021.
Según indicó la ONG conservacionista Bloom, a partir de la medida cada estado miembro podrá prohibir la pesca eléctrica en la zona de exclusión costera propia de 12 millas náuticas, es decir, 22,2 kilómetros.
Asimismo, el número de arrastreros autorizados a proseguir con la pesca eléctrica pasará de 84 arrastreros holandeses a un total de 10.
La ONG celebró la decisión, pero también solicitó “que se indemnice a los pescadores franceses dedicados a la pesca artesanal, que vienen sufriendo una fuerte disminución en sus capturas de lenguados tras la introducción y posterior explosión de la pesca eléctrica”.
Asimismo, Bloom exigió el “reembolso de los 21,5 millones de euros en subvenciones que dieron pie al desarrollo de la pesca eléctrica“, e instó al Colegio de Comisarios a “iniciar un procedimiento de infracción contra los Países Bajos por sus numerosas derogaciones ilegales“.